Misa en honor a la Virgen de Lourdes

La Coral Harmonía Polifónica canta de nuevo en la Real Parroquia de San Martín Obispo y San Antonio Abad. Otra ocasión para volver a participar en la misa de la celebración de Nuestra Señora de Lourdes, cuya imagen es venerada en una de sus capillas laterales. 

Ni que decir tiene que, para pertenecer a la Coral Harmonía Polifónica, no es condición ser creyente. Sin embargo, si se alberga un mínimo de esperanza en la existencia de Dios, habrá que pensar que, para la celebración de la Virgen de Lourdes, pareciera no haber mejores lecturas que las que se han leído hoy. 

Las lecturas del misal romano van recogiendo cada tiempo litúrgico unos fragmentos del Antiguo Testamento y del Evangelio que van rodando, de año en año, pasando del ciclo A, al B, al C y de nuevo al A. De modo que, a este domingo, 11 de febrero, en que se celebra esta memoria mariana de la Virgen de Lourdes, correspondían las lecturas 6º domingo del ciclo B.  Y precisamente, dos de los textos, uno del Levítico y otro del Evangelio de Marcos, con relatos referidos a los leprosos. Unos seres y que pasan por el periplo de ser excluidos de la sociedad por impuros, a ser de nuevo devueltos por Jesús de Nazaret a la comunidad, como miembros plenos de ella. Una sanación total. 

Es coincidencia y de las más oportunas, porque no en todas las celebraciones de la Virgen de Lourdes se leen estos textos. Aquel leproso tuvo total confianza para acercarse a Jesús y pedirle la curación. Y en su homilía, D. Mariano ha animado a la feligresía a pedir la curación del cuerpo y la del alma, por intercesión de la Virgen.

Nuestro programa con las piezas principales de la misa de Gounot  y con algunos cambios para la ocasión, concluía con el Ave María de Lourdes. Y para finalizar la celebración, con el canto de los Gozos a Nuestra Señora de Lourdes que acompañaban la procesión de las antorchas. Y como de costumbre, nuestro director, Ernest Artal además de dirigirnos con su cariño habitual, fue adaptando el ritmo de nuestro canto al paso procesional de las personas que asistieron. 

Algo de frío sí volvimos a pasar este mes de febrero, casi el mismo que el año anterior. Pero nos queda el ánimo que nos ofrecen las personas que se acercan a mostrarnos su afecto y simpatía, acompañado de algún elogio que siempre se agradece, además de la acogida de D. Mariano que hoy agradecía nuestra presencia, señalando que cantar como nosotros los hacemos es también oración. 

Ana Piera Orts. Contralto